1- ¿En qué se diferencian una norma social, una norma política y una norma moral?
Básicamente están basadas en el no cumplimiento y sus consecuencias. Una norma social está fundada por la sociedad en la que vivimos, que varía según nuestro entorno: nos influye en la forma de vestir, los valores, de pensar.. y se trata de normas no escritas fruto del paso del tiempo y su consecuente cambio de mentalidad. Su no cumplimiento implica rechazo de ese grupo hacia nosotros.Se trata de normas no escritas, pero conocidas por todos. Por otra parte, una norma moral es una norma universal relacionada con el sentido común que, a pesar de sufrir modificaciones (según área geográfica: Mozambique - Noruega...), todo el mundo entiende su concepto ya que forma parte del ser humano. Es una norma interior, que nos influye sobre todo en la manera de actuar. Incumpliendo esta norma, nos enfadamos con nosotros mismos y nos sentimos insatisfechos. Por el contrario, una norma jurídica es aquella proclamada por un grupo de personas, pertenecientes a la autoridad jurídica. Éstas son diferentes en cada país, ya que se ajustan al presente de cada región, con su consecuente transfondo de tradición. Su no cumplimiento, a diferencia de las anteriores, ímplica un castigo como una multa, una condena de prisión...Es una norma escrita, establecida y reconocida.
2 - ¿Por qué no se puede ser apolítico?
Porque ser apolítico supondría el no estar de acuerdo con el modelo de sociedad organizada en la que vivimos, es decir, el uso verdadero de esta palabra significaría ser partidario de un modelo anárquico, donde no existiesen las normas, fuera de una estructura organizada , cuando a lo que verdaderamente se refieren muchas personas con este término (mal empleado) es a no estar a favor de ninguno de los partidos que ostentan actualmente el poder, lo que sería "apartidismo".
3 - ¿En qué se diferencian la legalidad y la legitimidad?
Para que haya legitimidad, tiene que haber una legalidad, es decir, la cualidad de justicia en una ley dictada por una autoridad jurídica con una base legal. La legitimidad está subordinada teóricamente a la legalidad, ya que cuando una ley no es considerada legal ya que está mal elaborada, carece de legitimidad, la gente no la cumple y carece de eficacia. Sin embargo, a veces se promulgan algunas leyes que se atienen a la legalidad pero algunos individuos niegan su legitimidad ya que consideran que contiene algún aspecto injusto, a pesar de que la ley se atenga al sistema jurídico. Las leyes que cumplen los dos requisitos, legalidad y su posterior legitimidad, son las más eficaces.
4 - ¿Qué diferencia existe entre ostentar y detentar la autoridad?
Cuando una persona ostenta la autoridad , se ha ganado este estado a base de méritos en el ámbito profesional, familiar...etc, es decir, su autoridad equivale a un reconocimiento el cual ha sido otorgada por otros, y saben lo que necesita para llevar a cabo esa función. Un ejemplo sería la elección de un presidente en una democracia mediante sufragio. En cambio, cuando una persona detenta el poder significa que no ha hecho méritos para conseguirlo y por consiguiente, no tiene derecho a ello, se trata de una autoridad ilegítima porque no se dispone del saber necesario y las decisiones son tomadas por un reducido grupo de personas, con lo que no se tiene en cuenta la opinión colectiva. En muchos casos, estos regímenes desembocan en un abuso de poder y la aparición de un sistema totalitario. Un caso en el que se detenta el poder, por ejemplo, es en una dictadura o en la organización de un grupo mafioso.
5 - ¿Cuáles son las condiciones para que la autoridad se considere legítima?
Una autoridad se considera legítima cuando:
- Se tiene un conocimiento y un saber previo relacionado con la función que se va a dese
mpeñar.
- Se atiene a las bases de la legalidad
- Hay un reconocimiento público de los méritos de la persona, un apoyo de la sociedad dentro de los márgenes de la legalidad.
De igual manera, se dan excepciones en las que la legitimidad se va adquiriendo y viceversa, cuando la legitimidad se degrada por actos ilícitos, injustos o inmorales.